Museo Mollfulleda de Mineralogía. Arenys de Mar

Ayer tuve el inigualable placer de poder visitar por primera vez el Museo Mollfulleda de Mineralogía, junto a miembros del Grupo Mineralógico Catalán y la tutela de Marc Campeny, que nos realizó un recorrido guiado por todo el recinto, muy interesante y entretenido.

 El museo, se encuentra situado en la Calle Esglesia, 43; en la localidad de Arenys de Mar (Barcelona) y la entrada cuesta unos 3 euros en un día normal, aunque si perteneces a algún grupo minerálogico, eres docente o menor de 12 años o vas el primer domingo del mes, la entrada es gratuita, además existe tarifa reducida para acreditados con carnet de estudiante o carnet joven y mayores de 65 años. Esta misma entrada, te da además pase al museo de encajes, que está justo al lado. (Vamos que si no vas es porque no quieres).  

 Tras una pequeña introducción sobre el origen del museo y hacernos entrega de un completo dossier con láminas e información, comenzó nuestra visita. 
El Museo Museo Mollfulleda de Arenys de Mar apareció como una ampliación del Museo de Arenys de Mar ya fundado en 1917 y constituido por diverso patrimonio cultural de la localidad, (entre los que destacan una colección de piezas de encaje), gracias a la donación de Joaquim Mollfulleda i Borrell en 1988. Ubicándose en un edificio continuo al museo original. 

 Se divide en dos plantas. La planta baja cuenta con una pequeña entrada dedicada a los minerales fluorescentes, una sala de introducción a la mineralogía en la que podemos observar pequeños pero muy interesantes detalles, como una exposición de formas cristalográficas o una reseña de diferentes tipos de maclas y algunas buenas fotografías. 

 A partir de aquí, tenemos acceso a una sala mucho más amplia, en la que detenernos a observar una colección sistemática, de minerales tanto españoles como extranjeros, bastante completa, clasificada en vitrinas siguiendo el criterio de Strunz. Aquí se pueden observar, partiendo desde los elementos nativos, con piezas chulas de oro, plata... hasta llegar a los silicatos, pasando por un amplio derroche de fluoritas, calcitas y otros manjares que no pude fotografiar en su totalidad, pero de los que podéis haceros una idea con estas fotillos. 

      

     

          

 

      

       

 Aquí Marc, cuenta que te cuenta historias divertidas, interesantes y curiosas sobre las piezas que íbamos viendo.

Una segunda planta nos lleva a conocer con más profundidad la mineralogía catalana, con una amplia representación de los minerales de esta tierra, clasificados por criterio geográfico según las diferentes zonas y provincias de Cataluña.

    

 La verdad que el museo, a pesar de no destacar por su tamaño, resulta especialmente entrañable y acogedor y desde luego recomiendo su visita a todo aquel que pase por la zona. 
 Para finalizar, os dejo una fotillo que me ha gustado especialmente, en la que vemos a nuestro compañero y guía Marc, haciéndonos disfrutar con la última adquisición del museo, coltan!!!